CHETUMAL, Quintana Roo (Alejandra Carrión-POR ESTO).- Actualmente, la educación en México está en un par de manos: el de Elba Esther Gordillo Morales, líder vitalicia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y (SNTE) pieza fundamental dentro de la delincuencia electoral, la cual se prepara para poner de nuevo al servicio del gobierno espurio y del PAN en las elecciones presidenciales del 2012, a costa de manipular los recursos públicos destinados a las plazas docentes.
Gordillo Morales, un personaje importante dentro de la política en México, ha sabido manejar a su conveniencia la educación y la política, usando la primera de trampolín para jugar sucio en la segunda.
Y para muestra lo que está ocurriendo este 2011 con las plazas para docentes, que serán manipuladas para aceitar la estructura de “mapaches electorales” del SNTE.
Tan claro es su contubernio con el gobierno espurio de Felipe Calderón, que la presidenta vitalicia del SNTE no ha tenido empacho en confesar que negoció los puestos de Miguel Ángel Yunes al frente del Issste; de Roberto Campa en la coordinación del Sistema Nacional de Seguridad Pública; y de Francisco Yánez en la Lotería Nacional, como cobro de factura del apoyo que brindó al fraude en la elección presidencial del 2006.
Ahora, a un año de las elecciones presidenciales del 2012, las plazas para docentes son manipuladas al antojo de la “líder”, como parte de los preparativos para aceitar la maquinaria electoral que pondrá a disposición del gobierno espurio y del PAN.
A pesar de que existen más escuelas, más docentes, aumento de la matricula escolar, según lo constatan las estadísticas de la SEP y del INEGI, las plazas a concursar este 2011 fueron reducidas drásticamente, de 34 mil plazas que se concursaron el año pasado hoy sólo serán 21 mil, es decir, 13 mil plazas menos.
Miembros del magisterio tienen la explicación para esta reducción: se acercan las elecciones, tanto del Estado de México que es este fin de semana, como las del 2012, y es ahí donde seguramente acabarán o las plazas o los recursos económicos de ellas, como pago a los “mapaches electorales” que en cada contienda electoral despliegan el SNTE como soldaditos por toda la República Mexicana.
Los llamados mapaches electorales bajo las órdenes de Elba Esther Gordillo siguen cobrando su aportación al megafraude del 2006 y ya se preparan para las elecciones de 2012 poniendo a disposición de sus agremiados un gran porcentaje de plazas.
Casualmente en muchas entidades del país, la cantidad de plazas de este 2011 están 70 por ciento más abajo que en el 2010.
Para los docentes, esta faltante de plazas se debe al pago que le harán a los mapaches electorales para un posible magafraude electoral en el 2012.
Hay escuelas y miles de maestros, la única desventaja es que no hay plazas y las pocas que se general cada año se dan precisamente a personas “allegadas” a los altos políticos y funcionarios sindicales del SNTE, como hijos, sobrinos, ahijados, amigos, hermanos, compadres, menos a los maestros normalistas.
Por eso no es casual la reducción de plazas a concurso en el país a un año de la elección presidencial, cuando la matrícula escolar ha ido aumentando año con año.
Desde el 2008-2009, año en el que se empezaronn a “limitarse” de forma más estricta las plazas para maestros, al entrar en vigor la Alianza por la Calidad de la Educación, la matrícula escolar era de 25 millones 603 mil 606 alumnos de educación básica; en el 2009-2010, la matrícula fue de 26 millones 700 mil 065 alumnos; este 2010-2011 la matrícula es de 27 millones 380 mil.
Como se puede notar, las cifras de estudiantes en educación básica va crecimiento un gran porcentaje año con año y este 2011-2012 la matrícula aumentará a poco más de 28 millones de estudiantes.
Lo mismo ha sucedido con las plazas para docentes, de alguna forma, pues desde el 2008 habían venido en ascenso, sino es por el número de plazas, si por el número de Horas Semanas Mes (HSM).
Por ejemplo, en el 2008 se concursaron 6 mil 275 plazas y 23 mil 712 horas; en el 2009, 16 mil 387 plazas de jornada y 105 mil 007 HSM; en el 2010, 32 mil 546 plazas, de las cuales 62 por ciento corresponde a vacantes por jubilación, enfermedad o muerte.
Y este 2011-2012 las plazas a concurso son de 21 mil 431, lo cual rompe la tendencia de aumento de los años anteriores. El aumento fue diverso, es decir del concurso de plazas de 2008 a 2009, hubo un aumento de 10 mil 112 plazas; del 2009 al 2010, un aumento de 6 mil 159 plazas; y del 2010 al 2011 no solamente no aumentaron, sino que se redujeron a 11 mil 115 plazas, según cálculos aproximados.
Sacando un promedio de aumentos, podría decirse que este año debieron de aumentar 4 mil plazas más para maestros, pero se redujeron 11 mil.
Es decir, este año debieron de haberse concursado 36 mil 546 plazas, y en lugar de eso se eliminaron 15 mil 115 plazas docentes, las cuales según docentes quintanarroenses, servirán para destinar los recursos económicos que representan para recompensar a los miembros del SNTE involucrados en la maquinaria del fraude electoral.
Así, en su momento para este medio informativo, opinó referente al tema el profesor Cesar Manrique Esquivel, del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Educación en Quintana Roo (SITEQROO), quien dijo que en el estado hubo una reducción del 70 por ciento, y las plazas faltantes en todo México son parte de los acuerdos cupulares de Elba Esther Gordillo Morales con la política, y ha hecho de las plazas en este 2011 una “gran transacción” para beneficio de su estructura de mapaches electorales.
“Yo le atribuyo esta cuestión a un acuerdo cupular de Elba Esther Gordillo para beneficiar a cierta clase de la política o en su caso para los llamados maestros comisionados”, dijo el profesor con mas de 15 años de experiencia como docente.
Por su parte, uno de los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional del Sindicato Independiente de Trabajadores de México (SITEM), Alejandro Castillo Aguilar, explicó que no descarta esa posibilidad, puesto que todo lo que se ha manejado dentro del SNTE es a base de corruptelas, y un ejemplo de ellos son los exámenes de oposición de plazas docentes, que son una cortina de humo, pues muchas de esas plazas a concurso ya tiene nombre y apellido.
Y es por lo anterior que se sabe claramente que en SNTE empieza a mover sus cartas para las próximas elecciones a base de recursos que son exclusivos para los docentes. Dicho recurso es para el trabajo que ya han emprendido los llamados “mapaches electorales” de Elba Esther Gordillo Morales que desde enero ya están trabajando, pues en varias partes del país, hubo elecciones.
Un “mapache electoral”, es quien se dedica a manipular a los votantes y hasta a robar votos a favor de su partido.
El término viene del mapache, mamífero de la América del Norte, con piel de color gris oscuro, hocico blanco y cola muy poblada, con anillos blancos y oscuros alternados, así como con un antifaz que se asemeja en los ojos, que le da la apariencia de un ladrón de rostro entrecubierto.
Entendido dentro del ámbito electoral, mapache electoral, es el clásico ladrón de votos.
No es nueva esta actividad que llevan a cabo “ciertos” maestros a cambio de “ciertos beneficios” y es precisamente ahí donde en este año van acabar las plazas de muchos docentes que se han esforzado, por los acuerdos políticos de Gordillo Morales, la líder vitalicia del SNTE.
De acuerdo con una nota publicada por “La Tijereta, periodismo para pensar”, en enero del presente año, en esa fecha cerca de 500 profesores comisionados del SNTE fungieron como “mapaches electorales” en Sonora, Sinaloa, Nuevo León, Baja California y Coahuila y quienes han diseñado operativos de carácter electoral para intervenir de manera directa en el proceso político.
La estrategia es clara, el PAN y Nueva Alianza han empezado a movilizar a “mapaches electorales” de diferentes Estados coaccionando a los maestros a fin de otorgarles plazas, así como también recurren a la entrega de despensas y láminas.
Hay no menos de diez mil maestros —y probablemente muchos más—, a quienes la SEP y las secretarías de Educación estatales pagan sueldos, compensaciones, sobresueldos y bonificaciones, a veces bastante jugosos, sin realizar trabajo educativo. Son los famosos “comisionados”.
De ellos, la mitad están oficialmente adscritos a la estructura del propio SNTE, pero de los otros cinco mil se ignora a qué se dedican, aunque es un secreto a voces, que se trata de los llamados mapaches electorales, que se movilizan para realizar actividades no siempre —o más bien casi nunca— limpias y apegadas a la ley, en favor de los partidos con los que en un momento dado se alíe doña Elba Esther.
Inútiles han sido los esfuerzos por lograr que la SEP dé a conocer los nombres y ubicación de esos misteriosos “comisionados”.
Lo peor es que la señora Gordillo Morales seguirá cobrando facturas y recibiendo cheques en blanco de quienes aspiren a contender por la Presidencia en 2012 y tengan tratos directos con la operadora electoral más corrupta que haya existido en el país.
